martes, octubre 31, 2006
lunes, octubre 30, 2006
La polilla y la luz
Sabía desde el principio que pasaría algo así,
sólo que no pude evitar aferrarme a la ilusión y aprovecharlo mientras durase.
Agaché la mirada muchas veces obviando lo evidente, haciendo oídos sordos a tus mentiras, creando mi propia historia en la que había encontrado una opción de ser feliz.
Agaché la mirada muchas veces obviando lo evidente, haciendo oídos sordos a tus mentiras, creando mi propia historia en la que había encontrado una opción de ser feliz.


Como era de esperar, terminé ardiendo. Y ahora no tienes ni valor para decir una sola palabra. Me enamoré de tu alter ego, ese que construyes para escapar de tu vida. No de ti.
Otro día me molestaré en definirte.
Otro día me molestaré en definirte.
Etiquetas: Para Miss Blue
Lethe

Lete era también una náyade, hija de Eris (‘Discordia’ en la Teogonía de Hesíodo), si bien probablemente sea un personificación separada del olvido más que una referencia al río que lleva su nombre.
Algunas religiones mistéricas privadas enseñaban la existencia de otro río, el Mnemósine, cuyas aguas al ser bebidas hacían recordar todo y alcanzar la omnisciencia. A los iniciados se enseñaba que se les daría a elegir de qué río beber tras la muerte y que debían beber del Mnemósine en lugar del Lete.
Fuente: Wikipedia